Cuando os esperamos largos ratos a que os terminéis de arreglar antes de salir, a pesar de que lleguemos tarde y nos pongamos nerviosos. Ver que estáis espectaculares, aunque no os terminéis de ver. Y salir de casa sintiendo que llevas de la mano a la mujer más hermosa de la noche en la tierra, creyéndote un marqués.
No hay comentarios:
Publicar un comentario